- Componentes Clave De La Reanimación: Según Los Protocolos De La AHA
- 1. ¿Cuáles son los componentes de la Cadena de Supervivencia extrahospitalaria?
- 2. ¿Cuáles son los componentes de la Cadena de Supervivencia intrahospitalaria?
- 3. ¿Cuáles sopón los Componentes clave de una RCP de alta calidad?
- 4. ¿Cuáles son las Causas reversibles del paro cardíaco?
- 5. ¿Cuáles son los Principios de una Desfibrilación Precoz?
- 6. ¿Cuándo Reiniciar la RCP?
- 7. ¿Cuáles son las Estrategias para Optimizar la Fracción de Compresión Torácica (FCT)?
- 8. ¿Cómo y cuando la Comprobación del Ritmo en la Reanimación?
- 9. ¿Cuándo usar los Parches de Desfibrilación Autoadhesivos?
- 10. ¿Cómo usar las Descargas y Vasopresores en el Manejo de FV/TV sin Pulso?
- 11. ¿Cómo usar las Descargas y Antiarrítmicos en el Manejo de FV/TV sin Pulso?
- 12. ¿Cuándo y cómo usar la Monitorización Fisiológica durante la RCP?: Optimización de la Reanimación.
- 13. ¿Cuáles son las Vías de Acceso para la Administración de Fármacos durante la Reanimación?
- 14. ¿Cuáles y cuando la Administración de Fluidos y Fármacos en el Manejo del Paro Cardíaco?
- 15. ¿Cuándo tener en cuenta las Consideraciones Éticas y Traslado del Paciente?
- 16. ¿Cuándo usar Cardioversión Sincronizada vs. Descargas No Sincronizadas?
- Referencias
- Autor
- © Copyright, Saluya.
- John Jarbis Garcia Tamayo ⁞ @
- Aviso Médico Legal
Componentes Clave De La Reanimación: Según Los Protocolos De La AHA
Tiempo De Lectura Aprox: 35 min
La reanimación cardiopulmonar (RCP) y el Soporte Vital Cardiovascular Avanzado (ACLS) son pilares fundamentales en el manejo de emergencias cardíacas, como el paro cardíaco, las arritmias potencialmente mortales y los síndromes coronarios agudos. Los protocolos de la American Heart Association (AHA) proporcionan un enfoque sistemático y basado en evidencia para maximizar las posibilidades de supervivencia y recuperación neurológica de los pacientes. A continuación, 16 componentes clave que debes conocer para dominar estos protocolos:
1. ¿Cuáles son los componentes de la Cadena de Supervivencia extrahospitalaria?
La Cadena de Supervivencia Extrahospitalaria es un concepto desarrollado por la American Heart Association (AHA) que describe una serie de pasos críticos para maximizar las posibilidades de supervivencia en casos de paro cardíaco extrahospitalario (OHCA, por sus siglas en inglés). Estos pasos están diseñados para ser implementados por primeros respondedores, transeúntes capacitados y profesionales de la salud en el ámbito prehospitalario. Es imperativo conocer cada uno de los eslabones de la cadena y su importancia:

1. Reconocimiento inmediato y activación del sistema de emergencia
• Objetivo: Identificar rápidamente el paro cardíaco y activar los servicios de emergencia.
• Acciones clave:
o Reconocer los signos de paro cardíaco (inconsciencia, ausencia de respiración normal).
o Llamar al número local de emergencias (por ejemplo, 911 en EE. UU. ó el 123 en el área local) para solicitar ayuda profesional.
o Si hay un DEA (Desfibrilador Externo Automático) disponible, pedir que lo traigan.
• Importancia: La pronta activación del sistema de emergencia permite que llegue ayuda avanzada lo más rápido posible.
2. RCP temprana con énfasis en compresiones torácicas
• Objetivo: Mantener el flujo sanguíneo cerebral y coronario hasta que llegue ayuda avanzada.
• Acciones clave:
o Iniciar compresiones torácicas de inmediato:
Frecuencia: 100-120 compresiones por minuto.
Profundidad: 5-6 cm en adultos.
Permitir la expansión completa del tórax después de cada compresión.
o Si el rescatador está capacitado, realizar ventilaciones en una relación 30:2 (30 compresiones por 2 ventilaciones).
o Si no se está capacitado o no se desea hacer ventilaciones, realizar RCP con solo compresiones.
• Importancia: La RCP temprana duplica o triplica las posibilidades de supervivencia.
3. Desfibrilación rápida
• Objetivo: Restaurar un ritmo cardíaco efectivo mediante la desfibrilación.
• Acciones clave:
o Usar un DEA tan pronto como esté disponible.
o Encender el DEA y seguir las instrucciones verbales.
o Aplicar los parches y asegurarse de que nadie toque al paciente durante el análisis y la descarga.
o Reiniciar las compresiones inmediatamente después de la descarga, sin verificar el pulso.
• Importancia: La desfibrilación dentro de los primeros 3-5 minutos del paro cardíaco puede aumentar las tasas de supervivencia hasta en un 50-70%.
4. Soporte Vital Avanzado (SVA) y traslado rápido
• Objetivo: Proporcionar intervenciones avanzadas y trasladar al paciente a un centro hospitalario.
• Acciones clave:
o Manejo avanzado de la vía aérea: Intubación endotraqueal o uso de dispositivos supraglóticos.
o Administración de medicamentos: Adrenalina, amiodarona, atropina, etc.
o Monitoreo continuo: ECG, capnografía, presión arterial.
o Traslado rápido a un hospital con capacidad para brindar cuidados post-paro.
• Importancia: El SVA permite estabilizar al paciente y tratar causas reversibles durante el traslado.
5. Cuidados Post-Paro
• Objetivo: Optimizar la recuperación neurológica y prevenir complicaciones.
• Acciones clave:
o Control de la temperatura: Hipotermia terapéutica (32-36°C) durante 24 horas.
o Soporte hemodinámico: Mantener presión arterial y perfusión tisular adecuadas.
o Identificación de la causa: Estudios diagnósticos (ECG, ecocardiograma, laboratorios).
o Prevención de complicaciones: Monitorización continua y manejo de arritmias recurrentes.
• Importancia: Los cuidados post-paro mejoran significativamente las posibilidades de recuperación neurológica intacta.
La Cadena de Supervivencia Extrahospitalaria es una guía esencial para mejorar los resultados en casos de paro cardíaco fuera del hospital. Cada eslabón de la cadena es crucial y depende de la participación activa de la comunidad, los primeros respondedores y los profesionales de la salud. Si todos los eslabones se ejecutan de manera efectiva, las posibilidades de supervivencia y recuperación neurológica aumentan significativamente.
2. ¿Cuáles son los componentes de la Cadena de Supervivencia intrahospitalaria?
La Cadena de Supervivencia Intrahospitalaria es un concepto desarrollado por la American Heart Association (AHA) que describe los pasos críticos para maximizar las posibilidades de supervivencia en casos de paro cardíaco intrahospitalario (IHCA, por sus siglas en inglés). A diferencia de la cadena extrahospitalaria, esta se enfoca en el entorno hospitalario, donde los recursos y el personal capacitado están disponibles de inmediato. Igual que en la cadena extrahospitalaria, es imperativo conocer uno de los eslabones de la cadena intrahospitalaria y su importancia:

- Monitoreo y prevención
• Objetivo: Identificar a pacientes en riesgo de paro cardíaco y prevenir su ocurrencia.
• Acciones clave:
o Monitoreo continuo de signos vitales (frecuencia cardíaca, presión arterial, saturación de oxígeno).
o Uso de sistemas de alerta temprana (por ejemplo, puntuación de Early Warning Score) para identificar deterioro clínico.
o Intervenciones preventivas (oxigenación, corrección de alteraciones electrolíticas, manejo de la hipotensión).
• Importancia: La prevención y el reconocimiento temprano pueden evitar que ocurra un paro cardíaco. - Reconocimiento inmediato y activación del equipo de respuesta rápida
• Objetivo: Identificar el paro cardíaco y activar el equipo de respuesta rápida (RRT, por sus siglas en inglés) o el equipo de reanimación.
• Acciones clave:
o Reconocer los signos de paro cardíaco (inconsciencia, ausencia de respiración normal, ausencia de pulso).
o Activar el código azul o el sistema de emergencia intrahospitalario.
o Iniciar RCP básica mientras llega el equipo avanzado.
• Importancia: Una respuesta rápida y coordinada mejora las posibilidades de supervivencia. - RCP de alta calidad
• Objetivo: Mantener el flujo sanguíneo cerebral y coronario hasta que se restablezca un ritmo cardíaco efectivo.
• Acciones clave:
o Compresiones torácicas:
Frecuencia: 100-120 compresiones por minuto.
Profundidad: 5-6 cm en adultos.
Recoil completo: Permitir que el tórax vuelva a su posición normal después de cada compresión.
o Ventilaciones:
Relación compresión-ventilación: 30:2 en adultos (15:2 en niños con dos rescatadores).
Volumen suficiente para elevar el tórax, pero sin excederse para evitar distensión gástrica.
o Minimizar interrupciones: Menos de 10 segundos entre ciclos.
• Importancia: La RCP de alta calidad es fundamental para mantener la perfusión de órganos vitales. - Desfibrilación rápida (si está indicada)
• Objetivo: Restaurar un ritmo cardíaco efectivo en caso de ritmos desfibrilables (FV/TVSP).
• Acciones clave:
o Usar un desfibrilador manual o DEA tan pronto como esté disponible.
o Aplicar los parches y asegurarse de que nadie toque al paciente durante el análisis y la descarga.
o Reiniciar las compresiones inmediatamente después de la descarga, sin verificar el pulso.
• Importancia: La desfibrilación temprana es crucial para restaurar un ritmo cardíaco efectivo. - Soporte Vital Avanzado (ACLS) y cuidados post-paro
• Objetivo: Proporcionar intervenciones avanzadas y optimizar la recuperación neurológica.
• Acciones clave:
o Manejo avanzado de la vía aérea: Intubación endotraqueal o uso de dispositivos supraglóticos.
o Administración de medicamentos: Adrenalina, amiodarona, atropina, etc.
o Identificación y tratamiento de causas reversibles: 5 H y 5 T (Hipovolemia, Hipoxia, Hidrogeniones, Hipokalemia/Hiperkalemia, Hipotermia; Tóxicos, Taponamiento cardíaco, Neumotórax a tensión, Trombosis coronaria, Trombosis pulmonar).
o Cuidados post-paro:
Control de la temperatura: Hipotermia terapéutica (32-36°C) durante 24 horas.
Soporte hemodinámico: Mantener presión arterial y perfusión tisular adecuadas.
Estudios diagnósticos: ECG, ecocardiograma, laboratorios.
Prevención de complicaciones: Monitorización continua y manejo de arritmias recurrentes.
• Importancia: El ACLS y los cuidados post-paro mejoran significativamente los resultados neurológicos y la supervivencia.
La Cadena de Supervivencia Intrahospitalaria es una guía esencial para mejorar los resultados en casos de paro cardíaco dentro del hospital. Cada eslabón de la cadena es crucial y depende de la coordinación efectiva entre el personal de salud, el uso de recursos avanzados y la implementación de protocolos basados en evidencia. Si todos los eslabones se ejecutan de manera efectiva, las posibilidades de supervivencia y recuperación neurológica aumentan significativamente.
3. ¿Cuáles sopón los Componentes clave de una RCP de alta calidad?
La calidad de la RCP (Reanimación Cardiopulmonar) es un factor crítico para mejorar los resultados en pacientes con paro cardíaco. La American Heart Association (AHA) ha establecido pautas específicas para garantizar que la RCP sea efectiva y maximice las posibilidades de supervivencia.
1. Compresiones torácicas efectivas:
o Frecuencia: 100-120 compresiones por minuto.
o Profundidad:
Adultos: Al menos 5 cm, pero no más de 6 cm.
Niños y adolescentes: Al menos 1/3 del diámetro anteroposterior del tórax (aproximadamente 5 cm en niños y 4 cm en lactantes).
o Recoil completo: Permitir que el tórax vuelva a su posición normal después de cada compresión para permitir el llenado cardíaco.
o Minimizar interrupciones: Las pausas en las compresiones deben ser lo más breves posible (< 10 segundos).
2. Ventilaciones adecuadas:
o Relación compresión-ventilación:
Adultos: 30 compresiones por 2 ventilaciones (30:2) en RCP con un solo rescatador. Si hay dos rescatadores, se mantiene 30:2.
Niños y lactantes: 15 compresiones por 2 ventilaciones (15:2) con dos rescatadores.
o Volumen de ventilación: Suficiente para producir una elevación visible del tórax (aproximadamente 500-600 ml en adultos).
o Duración de la ventilación: Cada ventilación debe durar aproximadamente 1 segundo.
3. Minimizar el tiempo sin compresiones:
o Las interrupciones en las compresiones torácicas reducen el flujo sanguíneo cerebral y coronario.
o Cambios de rescatador cada 2 minutos o antes si el rescatador está fatigado.
o Coordinar las interrupciones para desfibrilación, intubación o administración de medicamentos.
4. Uso del DEA (Desfibrilador Externo Automático):
o Encender el DEA y seguir las instrucciones verbales.
o Aplicar los parches y asegurarse de que nadie toque al paciente durante el análisis y la descarga.
o Reiniciar las compresiones inmediatamente después de la descarga, sin verificar el pulso.
5. Monitoreo de la calidad de la RCP:
o Retroalimentación en tiempo real: Usar dispositivos de retroalimentación (si están disponibles) para monitorear la frecuencia, profundidad y recoil de las compresiones.
o Capnografía: Medir el CO2 espirado (EtCO2) para evaluar la efectividad de las compresiones torácicas (un EtCO2 < 10 mmHg sugiere compresiones inefectivas).
Errores comunes que reducen la calidad de la RCP
- Compresiones demasiado superficiales o profundas:
o Menos de 5 cm no generan suficiente flujo sanguíneo.
o Más de 6 cm puede causar lesiones torácicas. - Frecuencia de compresiones incorrecta:
o Menos de 100 compresiones por minuto reduce la perfusión.
o Más de 120 compresiones por minuto no permite un llenado cardíaco adecuado. - Interrupciones prolongadas:
o Pausas > 10 segundos reducen drásticamente las posibilidades de supervivencia. - Ventilaciones excesivas:
o Volúmenes demasiado grandes o ventilaciones demasiado rápidas pueden causar distensión gástrica y reducir el retorno venoso. - Fatiga del rescatador:
o La calidad de las compresiones disminuye rápidamente después de 1-2 minutos. Cambiar de rescatador cada 2 minutos es crucial.
4. ¿Cuáles son las Causas reversibles del paro cardíaco?
Las 5 H y 5 T son un marco mnemotécnico utilizado en el Soporte Vital Cardiovascular Avanzado (ACLS) de la American Heart Association (AHA) para recordar las causas reversibles de paro cardíaco. Identificar y tratar estas causas es fundamental durante la reanimación, ya que pueden ser la razón subyacente del paro y, si se corrigen, pueden mejorar significativamente las posibilidades de supervivencia.
Las 5 H
- Hipovolemia:
o Definición: Disminución del volumen sanguíneo circulante.
o Causas:
Hemorragia (trauma, gastrointestinal, quirúrgica).
Deshidratación severa (diarrea, vómitos, quemaduras).
o Tratamiento:
Reposición de líquidos (cristaloides o coloides).
Transfusión de sangre en caso de hemorragia. - Hipoxia:
o Definición: Niveles insuficientes de oxígeno en la sangre.
o Causas:
Obstrucción de la vía aérea (aspiración, edema).
Enfermedad pulmonar (neumonía, EPOC, asma).
Ventilación inadecuada durante la RCP.
o Tratamiento:
Asegurar la vía aérea (intubación, dispositivos supraglóticos).
Oxigenación adecuada (FiO2 al 100% inicialmente). - Hidrogeniones (acidosis):
o Definición: Acumulación de ácidos en el cuerpo (acidosis metabólica o respiratoria).
o Causas:
Acidosis metabólica (shock, insuficiencia renal, cetoacidosis diabética).
Acidosis respiratoria (hipoventilación, EPOC).
o Tratamiento:
Ventilación adecuada para corregir la acidosis respiratoria.
Bicarbonato de sodio en casos seleccionados de acidosis metabólica severa (pH < 7.1). - Hipokalemia/Hiperkalemia:
o Definición:
Hipokalemia: Niveles bajos de potasio.
Hiperkalemia: Niveles elevados de potasio.
o Causas:
Hipokalemia: Diuréticos, vómitos, diarrea.
Hiperkalemia: Insuficiencia renal, rabdomiólisis, medicamentos (IECA, ARA II).
o Tratamiento:
Hipokalemia: Reposición de potasio (IV).
Hiperkalemia: Gluconato de calcio (estabilización cardíaca), insulina-glucosa, bicarbonato, diálisis. - Hipotermia:
o Definición: Temperatura corporal central < 35°C.
o Causas:
Exposición al frío, inmersión en agua fría.
o Tratamiento:
Calentamiento activo (mantas térmicas, infusiones de líquidos calientes).
Evitar la desfibrilación repetida si la temperatura es < 30°C (priorizar el calentamiento).
Las 5 T
- Tóxicos:
o Definición: Intoxicación por medicamentos o sustancias.
o Causas:
Sobredosis de medicamentos (β-bloqueadores, calcioantagonistas, digoxina).
Drogas recreativas (cocaína, opioides).
Venenos (monóxido de carbono, cianuro).
o Tratamiento:
Antídotos específicos (naloxona para opioides, glucagón para β-bloqueadores).
Carbón activado en intoxicaciones recientes. - Taponamiento cardíaco:
o Definición: Acumulación de líquido en el pericardio que comprime el corazón.
o Causas:
Trauma, pericarditis, cáncer.
o Tratamiento:
Pericardiocentesis (drenaje del líquido pericárdico). - Neumotórax a Tensión:
o Definición: Acumulación de aire en la cavidad pleural que comprime el corazón y los pulmones.
o Causas:
Trauma, ventilación mecánica.
o Tratamiento:
Descompresión con aguja (toracocentesis) seguida de tubo torácico. - Trombosis coronaria (Infarto agudo de miocardio):
o Definición: Obstrucción de una arteria coronaria que causa isquemia miocárdica.
o Causas:
Aterosclerosis, ruptura de placa.
o Tratamiento:
Intervención coronaria percutánea (ICP) o trombolisis. - Trombosis pulmonar (Embolia pulmonar):
o Definición: Obstrucción de una arteria pulmonar por un coágulo.
o Causas:
Trombosis venosa profunda, inmovilización prolongada.
o Tratamiento:
Trombolisis o embolectomía.
Las 5 H y 5 T son una herramienta esencial para recordar y abordar las causas reversibles de paro cardíaco. Identificar y tratar estas condiciones durante la reanimación puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Siempre es importante mantener un enfoque sistemático y trabajar en equipo para garantizar que todas las posibles causas sean consideradas y manejadas adecuadamente.
5. ¿Cuáles son los Principios de una Desfibrilación Precoz?
La desfibrilación precoz es uno de los factores más críticos que determinan la supervivencia en un paro cardíaco. En este artículo, exploramos por qué el tiempo entre el colapso y la desfibrilación es crucial, cómo la fibrilación ventricular (FV) y la taquicardia ventricular (TV) sin pulso requieren una intervención inmediata, y por qué la combinación de RCP y desfibrilación temprana puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
¿Por Qué la Desfibrilación Precoz es Esencial?
- FV: El Ritmo Inicial Más Común en Paro Cardíaco Súbito
o La fibrilación ventricular (FV) es el ritmo inicial en la mayoría de los casos de paro cardíaco extrahospitalario presenciado.
o La TV sin pulso, si no se trata rápidamente, se deteriora a FV.
o En la FV, el corazón tiembla de manera caótica y no bombea sangre, lo que lleva a la falta de circulación y oxigenación. - La Desfibrilación es el Tratamiento Más Efectivo para la FV
o La desfibrilación eléctrica es la única forma de detener la FV y restaurar un ritmo cardíaco organizado.
o Sin desfibrilación, la FV progresa rápidamente a asistolia, un ritmo no desfibrilable con un pronóstico mucho peor. - El Tiempo es Crítico
o La probabilidad de éxito de la desfibrilación disminuye entre un 7% y un 10% por cada minuto que pasa sin intervención.
o Si un testigo realiza RCP inmediata, esta disminución se reduce al 3%-4% por minuto, lo que subraya la importancia de la RCP temprana.
Beneficios de la RCP y la Desfibrilación Temprana
- La RCP Proporciona un Flujo Sanguíneo Mínimo
o Mientras se prepara la desfibrilación, la RCP mantiene un flujo sanguíneo reducido al corazón y al cerebro, lo que puede prolongar la ventana de oportunidad para una desfibrilación exitosa. - La Combinación de RCP y DEA Aumenta la Supervivencia
o Estudios demuestran que la RCP temprana puede duplicar o triplicar las tasas de supervivencia en paros cardíacos súbitos presenciados.
o Los programas de acceso público a DEA (Desfibriladores Externos Automáticos) permiten que reanimadores legos realicen RCP y desfibrilación antes de la llegada de los servicios de emergencia, reduciendo el tiempo entre el colapso y la desfibrilación. - Cada Minuto Cuenta
o Por cada minuto que pasa sin desfibrilación, las posibilidades de supervivencia disminuyen significativamente.
o La implementación de programas comunitarios de DEA y la capacitación en RCP para el público general son estrategias clave para mejorar los resultados.
La desfibrilación precoz es el eslabón más importante en la cadena de supervivencia para pacientes con paro cardíaco súbito debido a FV o TV sin pulso. La combinación de RCP inmediata y desfibrilación dentro de los primeros minutos aumenta drásticamente las posibilidades de supervivencia y reduce el riesgo de daño cerebral irreversible.
Los programas de acceso público a DEA y la educación en RCP son herramientas esenciales para reducir el tiempo entre el colapso y la desfibrilación, salvando vidas en el proceso. Como profesionales de la salud y miembros de la comunidad, debemos trabajar juntos para promover estas iniciativas y mejorar los resultados en casos de paro cardíaco.
6. ¿Cuándo Reiniciar la RCP?
En el manejo de un paro cardíaco, reiniciar la RCP inmediatamente después de la desfibrilación es crucial para mantener la perfusión cerebral y coronaria. Debemos aprender los pasos clave y las mejores prácticas para reiniciar la RCP, minimizar las interrupciones en las compresiones torácicas y optimizar la fracción de compresión torácica (FCT). Además, entender cómo los profesionales de la salud pueden adaptar las estrategias de reanimación según el contexto y el nivel de entrenamiento.
Pasos Clave para Reiniciar la RCP
- Reiniciar Inmediatamente con Compresiones Torácicas
o Después de una descarga, reinicie la RCP inmediatamente, comenzando con compresiones torácicas.
o No pierda tiempo verificando el ritmo o el pulso a menos que el paciente muestre signos evidentes de actividad vital o que la monitorización avanzada indique un retorno a la circulación espontánea (RCE). - Establecer un Acceso Vascular (IV/IO)
o Mientras se realizan las compresiones, otro miembro del equipo debe establecer un acceso vascular (intravenoso o intraóseo) para administrar medicamentos como adrenalina o amiodarona. - Minimizar las Interrupciones en las Compresiones
o Las interrupciones en las compresiones torácicas reducen la presión de perfusión coronaria (PPC) y disminuyen las posibilidades de RCE.
o Los líderes del equipo deben coordinar las acciones para garantizar que las compresiones se interrumpan solo cuando sea estrictamente necesario.
7. ¿Cuáles son las Estrategias para Optimizar la Fracción de Compresión Torácica (FCT)?
La FCT es el porcentaje de tiempo dedicado a las compresiones torácicas durante la reanimación. Una FCT alta (idealmente >80%) está asociada con mejores resultados. Algunas estrategias para optimizarla son:
- Protocolos de Compresiones Continuas
o 200 compresiones continuas con insuflación pasiva de oxígeno: Este enfoque reduce las interrupciones y mejora la FCT.
o RCP solo con compresiones durante los primeros minutos: En casos de paro cardíaco presenciado, este método puede ser efectivo hasta que llegue el desfibrilador. - Ventilación Asíncrona
o Una vez establecido un dispositivo avanzado para la vía aérea, realizar ventilaciones asíncronas cada 6 segundos mientras se mantienen las compresiones continuas. - Relación Compresión-Ventilación (30:2)
o Para reanimadores con menos entrenamiento o en entornos donde este es el protocolo establecido, la relación 30:2 sigue siendo una opción válida.
8. ¿Cómo y cuando la Comprobación del Ritmo en la Reanimación?
La comprobación del ritmo es un paso crítico en el manejo de un paro cardíaco, pero debe realizarse de manera rápida y eficiente para minimizar las interrupciones en las compresiones torácicas. Es importante tener en cuenta cómo y cuándo realizar la comprobación del ritmo, qué hacer según el ritmo identificado y cómo garantizar una transición fluida entre las fases de la reanimación.
Pasos para la Comprobación del Ritmo
- Momento de la Comprobación
o Realice una comprobación del ritmo después de 2 minutos de RCP.
o La pausa en las compresiones torácicas para verificar el ritmo no debe exceder los 10 segundos. - Evaluación del Ritmo
o Utilice el monitor/desfibrilador para identificar si el ritmo es desfibrilable (FV/TV sin pulso) o no desfibrilable (asistolia/AESP).
Acciones Según el Ritmo Identificado
- Ritmo No Desfibrilable y Organizado
o Si el ritmo es organizado (complejos regulares y estrechos), un miembro del equipo debe intentar palpar el pulso.
o Si hay pulso palpable:
Detenga la RCP y proceda con la atención posparo cardíaco.
o Si no hay pulso o hay duda:
Reanude inmediatamente la RCP. - Ritmo No Desfibrilable y No Organizado (Asistolia/AESP)
o Si el ritmo es no desfibrilable y no hay pulso, proceda con la secuencia de asistolia/AESP (Pasos 9 a 11 del algoritmo de paro cardíaco).
o Continúe con la RCP y administre adrenalina cada 3-5 minutos. - Ritmo Desfibrilable (FV/TV sin Pulso)
o Si el ritmo es desfibrilable, administre una descarga según el tipo de desfibrilador:
Desfibrilador monofásico: 360 J.
Desfibrilador bifásico: 120-200 J (siga las recomendaciones del fabricante).
o Reanude inmediatamente la RCP durante 2 minutos después de la descarga.
9. ¿Cuándo usar los Parches de Desfibrilación Autoadhesivos?
En el manejo de un paro cardíaco, la desfibrilación es una intervención crítica que puede salvar vidas. Para garantizar su eficacia, es esencial utilizar los dispositivos y materiales adecuados. Sabemos de la importancia de los parches de desfibrilación autoadhesivos, recomendados por la Asociación Americana del Corazón (AHA), y cómo su uso mejora la eficacia de la desfibrilación al reducir la impedancia transtorácica.
¿Por Qué Usar Parches de Desfibrilación Autoadhesivos?
- Reducción de la Impedancia Transtorácica
o La impedancia transtorácica es la resistencia que ofrece el tórax al paso de la corriente eléctrica durante la desfibrilación.
o Los parches autoadhesivos, junto con materiales conductores como el gel, reducen esta resistencia, permitiendo que una mayor cantidad de energía llegue al corazón. - Facilidad de Uso y Seguridad
o Los parches autoadhesivos son fáciles de colocar y se adhieren firmemente al tórax, lo que minimiza el riesgo de desplazamiento durante la reanimación.
o Además, son más seguros para los profesionales de la salud, ya que reducen el riesgo de exposición accidental a la corriente eléctrica. - Eficacia en la Desfibrilación
o Al reducir la impedancia transtorácica, los parches autoadhesivos aumentan la probabilidad de una desfibrilación exitosa, especialmente en casos de fibrilación ventricular (FV) o taquicardia ventricular (TV) sin pulso.
Recomendaciones de la AHA
La Asociación Americana del Corazón (AHA) recomienda el uso rutinario de parches de desfibrilación autoadhesivos en lugar de palas manuales tradicionales. Esta recomendación se basa en evidencia que demuestra que los parches autoadhesivos:
• Mejoran la calidad de la desfibrilación.
• Reducen las interrupciones en las compresiones torácicas, ya que son más rápidos de colocar.
• Son compatibles con la mayoría de los desfibriladores modernos, tanto manuales como automáticos.
Cómo Usar los Parches Autoadhesivos
- Preparación del Paciente
o Asegúrese de que el tórax del paciente esté seco y libre de vello excesivo. Si es necesario, utilice una máquina de afeitar para eliminar el vello en las áreas donde se colocarán los parches. - Colocación de los Parches
o Coloque un parche en la parte superior derecha del tórax (debajo de la clavícula) y el otro en la parte inferior izquierda (debajo del pezón).
o Asegúrese de que los parches estén bien adheridos y no haya arrugas que puedan interferir con la conducción eléctrica. - Conexión al Desfibrilador
o Conecte los cables del desfibrilador a los parches autoadhesivos.
o Siga las instrucciones del dispositivo para realizar la desfibrilación.
10. ¿Cómo usar las Descargas y Vasopresores en el Manejo de FV/TV sin Pulso?
En el tratamiento de un paro cardíaco por fibrilación ventricular (FV) o taquicardia ventricular (TV) sin pulso, la combinación de desfibrilación y administración de vasopresores es fundamental para restaurar la circulación espontánea (RCE). Es imperativo conocer el protocolo para la administración de descargas y vasopresores, así como las recomendaciones actualizadas de la Asociación Americana del Corazón (AHA) sobre el uso de adrenalina y la exclusión de la vasopresina en el algoritmo de reanimación.
Protocolo para Descargas y RCP en FV/TV sin Pulso
- Administración de una Descarga
o Si el ritmo es FV/TV sin pulso, administre una descarga según el tipo de desfibrilador:
Desfibrilador monofásico: 360 J.
Desfibrilador bifásico: 120-200 J (siga las recomendaciones del fabricante).
o Reanude inmediatamente la RCP durante 2 minutos después de la descarga, comenzando con compresiones torácicas. - Uso de Adrenalina
o Después de la segunda descarga, si se dispone de acceso IV/IO, administre adrenalina:
Dosis: 1 mg IV/IO.
Frecuencia: Repetir cada 3-5 minutos durante la reanimación.
o Mecanismo de acción: La adrenalina actúa como vasopresor, aumentando la presión arterial diastólica aórtica y mejorando la perfusión cerebral y coronaria durante la RCP. - Minimizar Interrupciones en las Compresiones
o La interrupción para la administración de la descarga y la comprobación del ritmo no debe exceder los 10 segundos.
o El líder del equipo debe garantizar la seguridad del equipo durante la carga del desfibrilador mientras se realizan las compresiones.
Adrenalina: Efectos y Limitaciones
- Efectos beneficiosos:
o Aumenta la presión de perfusión coronaria y cerebral.
o Mejora las posibilidades de retorno a la circulación espontánea (RCE). - Limitaciones:
o No se ha demostrado que mejore la supervivencia al alta hospitalaria ni los resultados neurológicos en pacientes con paro cardíaco.
o A pesar de esto, la AHA sigue recomendando su uso debido a su impacto en la RCE.
Exclusión de la Vasopresina en las Guías de la AHA
En la Actualización de las Guías de la AHA de 2015, la vasopresina fue eliminada del algoritmo de paro cardíaco.
• Razón: No ofrece ventajas adicionales sobre la adrenalina en el manejo del paro cardíaco.
• Recomendación actual: Utilizar adrenalina como único vasopresor durante la reanimación.
11. ¿Cómo usar las Descargas y Antiarrítmicos en el Manejo de FV/TV sin Pulso?
En el tratamiento de un paro cardíaco por fibrilación ventricular (FV) o taquicardia ventricular (TV) sin pulso, la desfibrilación y el uso de fármacos antiarrítmicos son componentes clave para restaurar un ritmo cardíaco efectivo. Es obligatorio saber el protocolo para la administración de descargas y antiarrítmicos, destacando el papel de la amiodarona, la lidocaína y el sulfato de magnesio en la reanimación.
Protocolo para Descargas y RCP
- Administración de una Descarga
o Si el ritmo es FV/TV sin pulso, administre una descarga según el tipo de desfibrilador:
Desfibrilador monofásico: 360 J.
Desfibrilador bifásico: 120-200 J (siga las recomendaciones del fabricante).
o Reanude inmediatamente la RCP durante 2 minutos después de la descarga, comenzando con compresiones torácicas. - Consideración de Fármacos Antiarrítmicos
o Los profesionales de la salud pueden considerar la administración de antiarrítmicos antes o después de la descarga, aunque la evidencia sobre su impacto en la supervivencia al alta hospitalaria es limitada.
Amiodarona: Antiarrítmico de Primera Línea
- Indicación: FV/TV sin pulso refractaria a la desfibrilación.
- Dosis:
o Primera dosis: 300 mg en bolo IV/IO.
o Segunda dosis (si es necesario): 150 mg IV/IO. - Mecanismo de acción:
o Bloquea los canales de sodio (efecto de clase I).
o Ejerce acción antisimpática no competitiva (efecto de clase II).
o Prolonga el potencial de acción cardíaco (efecto de clase III). - Beneficios: Mejora la tasa de retorno a la circulación espontánea (RCE) y la supervivencia hasta el ingreso hospitalario.
Lidocaína: Alternativa a la Amiodarona
- Indicación: Cuando no se dispone de amiodarona.
- Dosis:
o Primera dosis: 1-1.5 mg/kg IV/IO.
o Dosis adicionales: 0.5-0.75 mg/kg IV/IO cada 5-10 minutos, hasta un máximo de 3 mg/kg. - Mecanismo de acción:
o Bloquea los canales de sodio, reduciendo la excitabilidad cardíaca.
o Suprime la automaticidad del tejido de conducción cardíaco.
Sulfato de Magnesio: Uso Específico en Torsades de Pointes
- Indicación: Torsades de pointes asociadas con un intervalo QT prolongado.
- Dosis: 1-2 g IV/IO diluidos en 10 ml de solución salina o dextrosa al 5%, administrados en bolo durante 5-20 minutos.
- Mecanismo de acción:
o Suprime los canales de calcio auriculares y las posdespolarizaciones ventriculares.
o Actúa como agonista de la bomba de sodio/potasio. - Nota: No se recomienda su uso rutinario en paros cardíacos a menos que exista torsades de pointes.
12. ¿Cuándo y cómo usar la Monitorización Fisiológica durante la RCP?: Optimización de la Reanimación.
La monitorización fisiológica durante la reanimación cardiopulmonar (RCP) es una herramienta esencial para evaluar la calidad de las compresiones torácicas, optimizar el flujo sanguíneo y detectar el retorno a la circulación espontánea (RCE). La Asociación Americana del Corazón (AHA) recomienda el uso de capnografía y otros parámetros fisiológicos, como la presión de perfusión coronaria (PPC) y la saturación de oxígeno venoso central (ScvO2), para guiar el tratamiento durante un paro cardíaco. En el siguiente aparte aprenderemos cómo estas herramientas pueden mejorar los resultados de la reanimación.
Capnografía: CO2 al Final de la Espiración (PETCO2)
La capnografía mide la concentración de dióxido de carbono (CO2) al final de la espiración (PETCO2) y es una de las herramientas más útiles durante la RCP.
- Indicadores Clave:
o PETCO2 < 10 mm Hg: Sugiere un flujo sanguíneo pulmonar insuficiente y una baja probabilidad de RCE. o PETCO2 > 35-40 mm Hg: Un aumento brusco puede indicar RCE. - Aplicaciones Prácticas:
o Optimización de las compresiones torácicas: Si el PETCO2 es bajo, ajuste la técnica de compresiones para mejorar el flujo sanguíneo.
o Guía para el uso de vasopresores: Un PETCO2 persistentemente bajo puede indicar la necesidad de administrar adrenalina.
Presión de Perfusión Coronaria (PPC) y Presión de Relajación Arterial
La PPC es un indicador clave del flujo sanguíneo miocárdico durante la RCP. Una alternativa práctica es la presión de relajación arterial, que se puede medir con un catéter intraarterial.
- Valores Clave:
o Presión de relajación arterial < 20 mm Hg: Sugiere una perfusión coronaria insuficiente. - Aplicaciones Prácticas:
o Mejora de las compresiones torácicas: Ajuste la técnica para aumentar la presión de relajación arterial.
o Uso de vasopresores: Considere la administración de adrenalina si la presión es baja.
Saturación de Oxígeno Venoso Central (ScvO2)
La ScvO2 refleja el equilibrio entre el suministro y el consumo de oxígeno. Durante la RCP, puede ser un indicador útil del gasto cardíaco.
- Valores Clave:
o Intervalo normal: 60%-80%.
o ScvO2 < 60%: Sugiere un suministro de oxígeno insuficiente. - Aplicaciones Prácticas:
o Optimización de la RCP: Si la ScvO2 es baja, ajuste las compresiones torácicas y la ventilación.
o Guía para el tratamiento: Un aumento brusco en la ScvO2 puede indicar RCE.
La monitorización fisiológica durante la RCP, incluyendo la capnografía, la presión de relajación arterial y la ScvO2, es una herramienta valiosa para optimizar la reanimación y detectar el RCE. Aunque su uso no está respaldado por evidencia clínica robusta, es razonable utilizarla cuando está disponible para guiar las intervenciones y mejorar la calidad de la RCP.
Los equipos de reanimación deben estar familiarizados con estas herramientas y utilizarlas de manera estratégica para maximizar las posibilidades de supervivencia en casos de paro cardíaco.
13. ¿Cuáles son las Vías de Acceso para la Administración de Fármacos durante la Reanimación?
Durante un paro cardíaco, la prioridad absoluta es la RCP de alta calidad y la desfibrilación precoz. Sin embargo, la administración de fármacos también juega un papel importante en el manejo del paciente. Debemos dominar las vías de acceso más utilizadas para la administración de fármacos durante la reanimación: intravenosa (IV), intraósea (IO) y endotraqueal (ET), destacando sus ventajas, limitaciones y aplicaciones prácticas.
Prioridades en la Reanimación
- RCP de Alta Calidad:
o Compresiones torácicas efectivas (100-120 por minuto, profundidad de 5-6 cm).
o Minimizar interrupciones en las compresiones. - Desfibrilación Precoz:
o Administrar una descarga en caso de ritmos desfibrilables (FV/TV sin pulso). - Administración de Fármacos:
o Aunque los fármacos no han demostrado mejorar la supervivencia al alta, son útiles para apoyar la reanimación.
o Las vías IV e IO son preferibles sobre la vía ET.
Vía Intravenosa (IV)
La vía intravenosa periférica es la opción preferida para la administración de fármacos durante la reanimación, a menos que ya esté disponible un acceso venoso central.
- Ventajas:
o Fácil de establecer sin interrumpir la RCP.
o No requiere habilidades avanzadas. - Consideraciones:
o Los fármacos tardan 1-2 minutos en llegar a la circulación central cuando se administran por vía periférica.
o Para facilitar la circulación del fármaco:
Administre el fármaco en bolo.
Siga con 20 ml de líquido IV.
Eleve la extremidad durante 10-20 segundos. - Vía Venosa Central:
o No es necesaria en la mayoría de los casos.
o Puede causar interrupciones en la RCP y complicaciones como hematomas o hemorragias.
Vía Intraósea (IO)
La vía intraósea es una alternativa segura y eficaz cuando no se puede establecer un acceso IV.
- Ventajas:
o Puede establecerse en 30-60 segundos.
o Válida para todas las edades.
o Proporciona acceso a un plexo venoso no colapsable en la médula ósea. - Aplicaciones:
o Cualquier fármaco o líquido utilizado en SVCA/ACLS puede administrarse por vía IO.
o Es preferible sobre la vía ET. - Técnica:
o Utilice una aguja rígida diseñada específicamente para acceso intraóseo.
o Los sitios comunes de inserción incluyen la tibia proximal, el húmero o el esternón.
Vía Endotraqueal (ET)
La vía endotraqueal es la opción menos preferida debido a la absorción irregular de los fármacos.
- Limitaciones:
o La dosis óptima de los fármacos administrados por vía ET es desconocida.
o Se recomienda una dosis 2-2.5 veces mayor que la vía IV.
o La RCP debe interrumpirse brevemente para administrar el fármaco. - Fármacos Compatibles:
o Adrenalina, vasopresina y lidocaína pueden absorberse a través de la vía ET.
o Diluya el fármaco en 5-10 ml de agua bidestilada o solución salina antes de la administración. - Técnica:
o Inyecte el fármaco directamente en el tubo ET.
La elección de la vía de acceso para la administración de fármacos durante la reanimación depende de la disponibilidad, la experiencia del equipo y las circunstancias del paciente. La vía IV periférica es la opción preferida, seguida de la vía IO. La vía ET debe reservarse para situaciones en las que no sea posible establecer un acceso IV o IO.
14. ¿Cuáles y cuando la Administración de Fluidos y Fármacos en el Manejo del Paro Cardíaco?
En el tratamiento del paro cardíaco, la administración de fluidos y fármacos vasoactivos juega un papel crucial para optimizar la presión arterial, el gasto cardíaco y la perfusión sistémica. Aunque no existe un consenso sobre el nivel óptimo de presión arterial posparo, un objetivo razonable es mantener una presión arterial media (PAM) ≥ 65 mm Hg. Ahora conoceremos las estrategias para la administración de fluidos, vasopresores, antiarrítmicos y esteroides durante la reanimación.
Administración de Fluidos
- Objetivo: Restaurar el volumen de líquido extracelular en pacientes hipovolémicos.
- Soluciones Recomendadas:
o Solución salina normal o Ringer lactato.
o Evite el uso de D5W (dextrosa al 5%), ya que puede reducir rápidamente los niveles de sodio sérico. - Monitorización:
o Supervise los electrolitos séricos para evitar desequilibrios.
Vasopresores
Los vasopresores, como la adrenalina, son fundamentales para mejorar la presión arterial y el gasto cardíaco durante la reanimación.
- Adrenalina:
o Dosis: 1 mg IV/IO cada 3-5 minutos.
o Mecanismo de acción: Estimula los receptores adrenérgicos, causando vasoconstricción y aumentando la presión arterial y la frecuencia cardíaca.
o Efectos: Mejora el retorno a la circulación espontánea (RCE) y las tasas de ingreso hospitalario, pero no se ha demostrado que mejore la supervivencia al alta.
o Vía ET: Si no hay acceso IV/IO, administre 2-2.5 mg diluidos en 5-10 ml de agua bidestilada o solución salina. - Limitaciones:
o No se recomienda el uso de dosis altas o aumento de dosis de adrenalina, ya que no mejora la supervivencia al alta ni los resultados neurológicos.
Antiarrítmicos
Los antiarrítmicos, como la amiodarona y la lidocaína, se utilizan para tratar ritmos desfibrilables refractarios.
- Amiodarona:
o Indicación: FV/TV sin pulso que no responde a la desfibrilación, RCP o vasopresores.
o Dosis: 300 mg IV/IO como primera dosis, seguido de 150 mg si es necesario.
o Mecanismo de acción: Bloquea los canales de sodio, potasio y calcio, y tiene propiedades bloqueantes alfa y beta-adrenérgicas. - Lidocaína:
o Indicación: Alternativa a la amiodarona cuando esta no está disponible.
o Dosis: 1-1.5 mg/kg IV/IO, seguido de 0.5-0.75 mg/kg cada 5-10 minutos (máximo 3 mg/kg).
o Vía ET: 2-4 mg/kg si no hay acceso IV/IO. - Sulfato de Magnesio:
o Indicación: Torsades de pointes asociadas con un intervalo QT prolongado.
o Dosis: 1-2 g IV/IO diluidos en 10 ml de solución salina o dextrosa al 5%, administrados en 5-20 minutos.
Esteroides en el Paro Cardíaco
El uso de esteroides en el paro cardíaco ha sido evaluado en estudios clínicos, con resultados mixtos.
- Paro Cardíaco Intrahospitalario (PCIH):
o La combinación de metilprednisolona, vasopresina y adrenalina durante el paro, seguida de hidrocortisona después del RCE, ha mostrado mejorar la supervivencia al alta y los resultados neurológicos en algunos estudios.
o Sin embargo, no se recomienda el uso rutinario de esteroides solos en PCIH. - Paro Cardíaco Extrahospitalario (PCEH):
o Los estudios no han demostrado beneficios claros en la supervivencia al alta con el uso de esteroides.
o La dexametasona y la hidrocortisona no mostraron mejoras significativas en comparación con el placebo.
La administración de fluidos, vasopresores y antiarrítmicos es esencial para optimizar la reanimación en casos de paro cardíaco. Aunque la adrenalina y la amiodarona son pilares del tratamiento, su impacto en la supervivencia al alta sigue siendo limitado.
El uso de esteroides en combinación con vasopresores puede considerarse en PCIH, pero no se recomienda su uso rutinario en PCEH. Los equipos de reanimación deben estar familiarizados con estas estrategias y adaptarlas según las necesidades del paciente y el contexto clínico.
15. ¿Cuándo tener en cuenta las Consideraciones Éticas y Traslado del Paciente?
- Órdenes de No Reanimación (ODNR):
o Respete las decisiones del paciente y las ODNR documentadas.
o En ausencia de ODNR, proporcione una reanimación competente y completa. - Traslado del Paciente:
o En casos de paro cardíaco extrahospitalario, traslade al paciente a un hospital con capacidad para brindar atención posparo cardíaco integral.
o En casos de paro cardíaco intrahospitalario, traslade al paciente a una unidad de cuidados críticos.
El manejo de la asistolia requiere un enfoque sistemático que combine RCP de alta calidad, la administración de adrenalina y la identificación de causas reversibles. Aunque la asistolia es un ritmo de mal pronóstico, es crucial descartar errores técnicos y considerar situaciones especiales como la hipotermia o la sobredosis de fármacos.
Los profesionales de la salud deben estar familiarizados con las consideraciones éticas y los protocolos específicos para la interrupción de los esfuerzos de reanimación, respetando siempre las decisiones del paciente y sus familiares.
16. ¿Cuándo usar Cardioversión Sincronizada vs. Descargas No Sincronizadas?
- Descargas Sincronizadas:
o Indicación: Taquicardia con pulso (TSV, FA, Flúter, TV monomórfica).
o Mecanismo: La descarga se sincroniza con el pico de la onda R para evitar la inducción de FV.
o Energía:
Taquicardia de Complejo Estrecho: 50-100 J.
Taquicardia de Complejo Ancho: 100 J (aumentar si es necesario). - Descargas No Sincronizadas:
o Indicación: Fibrilación ventricular (FV) o taquicardia ventricular (TV) polimórfica.
o Mecanismo: La descarga se administra de inmediato, sin sincronización.
o Energía:
FV/TV Polimórfica: Comience con 120-200 J (bifásico) o 360 J (monofásico).

Referencias
- Papadakis MA, McPhee SJ, Rabow MW. Diagnóstico Clínico y Tratamiento. 15ª ed. México: McGraw-Hill; 2020.
- Rozman C, Cardellach F. Medicina Interna. 19ª ed. Barcelona: Elsevier; 2020.
- Loscalzo J, Fauci A, Kasper D, Hauser S, Longo D, Jameson JL. Harrison’s Principios de Medicina Interna. 21ª ed. México: McGraw-Hill; 2022.
- Goldman L, Schafer AI. Cecil y Goldman. Tratado de Medicina Interna. 26ª ed. Barcelona: Elsevier; 2020.
- Gómez Ayala AE. Guía de Atención Rápida en Clínicas Médicas. 1ª ed. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2015.
- Schwartz MW, Bell LM, Bingham PM, Chung EK, Friedman DF, Palusci VJ. Schwartz. Manual de Pediatría Clínica. 6ª ed. Barcelona: Elsevier; 2016.
- Benito Fernández J, Mintegi Raso S. Urgencias y Tratamiento del Niño Grave: Casos Prácticos. 1ª ed. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2015.